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Autor: Equipo de Capacitación y Prevención de riesgos Grupo Facto
Pocas son las actividades catalogadas como prioritarias por el Estado ante esta pandemia, entre estas se encuentran aquellas que desarrollan los guardias de seguridad, las cuales están presentes de manera cotidiana en nuestra vida y que constituyen a menudo el primer punto de contacto entre las personas y las instalaciones.
Situaciones como usar uniforme por tiempos prolongados, portar invariablemente su cubre bocas, dosificar y usar gel antibacterial, ser el filtro de personas, objetos o vehículos y en lo general la naturaleza de su trabajo como actividad 24/7 e ininterrumpidamente coloca esta profesión en la primera línea de defensa ante situaciones de riesgo que demandan de su inexcusable involucramiento.
El COVID-19 y sus múltiples consecuencias a nivel pandemia han tenido un impacto muy particular en los cuerpos de seguridad, es decir los guardias de seguridad, las policías, bomberos y unidades de rescate, son la primera línea de respuesta, atendiendo no solo las emergencias propias de sus funciones sino también las nuevas funciones relacionadas con la crisis sanitaria.
Guardias de seguridad como grupo de alto riesgo
Las nuevas funciones que hoy en día desarrolla este colectivo los sitúa en la primera línea de respuesta ante el COVID-19 convirtiéndolos en un grupo de alto riesgo, anteponiendo la vocación de servicio a las afectaciones operativas. Además los datos nos indican que estos cambios también estarían afectando los patrones delincuenciales y de incidencias.
El contexto pandémico, nos demanda analizar con distintos enfoques los cambios y adaptaciones en el trabajo que desempeñan los guardias de seguridad garantizando la efectividad de los protocolos, legitimando y robusteciendo la autoridad de estos dentro de las distintas locaciones.
Seguridad en pandemia
Más trabajo, más responsabilidades con similares medios son ejemplos de cómo la pandemia ha obligado a las empresas de seguridad a redefinir y clasificar prioridades para racionar de manera eficiente los recursos.
Como hemos visto el entorno pandémico se relaciona estrechamente con los medios y medidas que son adoptadas por los guardias de seguridad dentro de la nueva normalidad, sobreponiendo el interés colectivo para minimizar no solamente los riesgos delictivos, sino sumar esfuerzos para reducir las consecuencias del COVID-19.
Es por todo esto que los guardias de seguridad son parte de esta búsqueda de una solución, son factores de cambio en esta pandemia aunque muchas veces este esfuerzo pueda pasar inadvertido.
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